Vuelve y juega de nuevo indígenas del departamento de Risaralda se asentarán en Bogotá como protesta por el abandono de parte del gobierno nacional.
Mas de tres mil indígenas, pertenecientes a la comunidad Embera Chami, con la protesta que será de manera indefinida, el grupo de indígenas reclaman garantías sobre cinco puntos:
Educación, agua potable, salud, seguridad alimentaria y vivienda. Los representantes de esta comunidad presentaran una petición especial relacionada con el fallecimiento de unos 100 menores en los dos últimos años por desnutrición.
Exigen del gobierno una mayor atención que sean visibilizados por entes gubernamentales y se apliquen soluciones.
Lo cierto es que la historia se repite miles de indígenas que pasan a ser indigentes en las calles de Bogotá expuestos a la prostitución y la drogadicción y las mujeres y menores a las violaciones, de nuevo se tomaran lugares emblemáticos de la capital del país por tiempo indefinido.
Que pasa con las normativas de los resguardos, si bien son comunidades ancestrales, reciben apoyo del gobierno deberían tener garantizado su vivir.
Solo se mencionan en campaña junto con las negritudes y raizales pero la situación de estas comunidades se agrava cada día más, se volvieron paisaje en la capital de la republica y en todo el territorio nacional ejerciendo la mendicidad.