Por Carolina Espitia, Senadora de la República.

Iniciamos este 2025 con energía renovada, inspirados por el diálogo constante con
ustedes, los ciudadanos y ciudadanas de nuestro país. Sus voces de aliento,
muestras de confianza y, sobre todo, sus esperanzas nos impulsan a trabajar con
disciplina, responsabilidad y un profundo respeto por el mandato que nos han
otorgado.


Sabemos que enfrentamos un año lleno de retos e incertidumbres, pero también de
grandes oportunidades. Desde el Senado de la República, estamos listos para
convocar El Poder de las Voluntades y transformar esos desafíos en soluciones que
mejoren la calidad de vida de millones de colombianos y colombianas. Es nuestro
compromiso y misión honrar el voto de confianza que ustedes depositaron en
nosotros para ser su voz en el Senado, uno de los espacios de toma de decisiones
más importantes del país.


En estos dos años en el Senado, hemos logrado avances significativos.
Participamos activamente en la construcción del Plan Nacional de Desarrollo,
incidiendo en el fortalecimiento del sector agro, impulsando la educación pública y
la generación de empleo, con especial atención en las mujeres, quienes son pilares
fundamentales del desarrollo. En la discusión de la Reforma Pensional, destacamos
por nuestros aportes a favor de la tercera edad campesina y de los cuidadores de
personas con discapacidad. Desde la Comisión Tercera, que aborda asuntos
económicos, llevamos a cabo debates de control político a los ministerios con el
objetivo de acelerar la ejecución presupuestal, permitiendo así llegar a las regiones
con soluciones que al mismo tiempo, dinamicen la economía local.


Además, fuimos destacados como uno de los equipos legislativos más activos en el
estudio y perfeccionamiento de proyectos de ley. Igualmente, dentro del recinto del
Senado, somos un referente de un trabajo juicioso y técnico que siempre aboga
porque las leyes no se queden en el papel, sino que pasen a la acción efectiva.
Adicionalmente, logramos la aprobación de nuestra primera gran iniciativa: la Ley
de Nivelación Escolar Pospandemia, que beneficiará a millones de estudiantes,
especialmente en zonas rurales. Esta ley permitirá que niñas, niños y jóvenes
recuperen el terreno académico perdido durante los confinamientos por la
pandemia, brindándoles las herramientas necesarias para un futuro con más
oportunidades.


Este año continuaremos trabajando sin descanso para materializar iniciativas que
transformen vidas. Dentro de nuestra agenda legislativa para el primer semestre
destacan:
Proyecto de Ley de Mujer Rural, Campesina y Pescadora: Queremos dignificar el
trabajo de las mujeres que hacen posible que los alimentos lleguen a nuestras
mesas. Este proyecto propone reformar y actualizar la Ley 731 de 2002 para reducir
las brechas de género en el campo, con medidas que garanticen acceso a la tierra,
educación, crédito y participación política. También aborda la violencia de género y
reconoce el triple rol de las mujeres rurales: productivo, reproductivo y doméstico,
con especial énfasis en las víctimas del conflicto armado.


Como hijos e hijas de familias campesinas, conocemos muy bien las dificultades
que afronta el campo y sabemos que el desarrollo rural es clave para cerrar las
brechas entre lo rural y lo urbano. Por eso, seguiremos impulsando nuestro proyecto
de ley para ampliar la cobertura de bienes y servicios públicos en la ruralidad. Este
proyecto también busca mejorar el acceso a servicios esenciales como salud,
educación y saneamiento en las zonas rurales, además de promover inversión en
infraestructura, acceso a tecnología y fortalecimiento de la producción agrícola.
Proyecto de Ley de Bibliotecas Escolares: Como fruto de un proceso que nació
gracias a la educación pública, promovemos este proyecto porque creemos que la
educación es la mejor herramienta para el cambio social. La iniciativa busca
garantizar que todas las instituciones educativas del país, tanto públicas como
privadas, cuenten con bibliotecas escolares de calidad. Las bibliotecas son
esenciales para reducir la desigualdad en el acceso al conocimiento y elevar la
calidad educativa en Colombia.


Asimismo, abogamos por la inclusión y la equidad como prioridades. Insistiremos
en la aprobación de dos proyectos fundamentales:
Exenciones de pico y placa para vehículos que transporten a personas con
discapacidad en todo el territorio nacional.
Reducción del número de semanas cotizadas para personas con calificación de
invalidez superior al 50 % y la extensión de este beneficio a quienes tengan entre el
25 % y el 49 %.


Por otra parte, este nuevo año también se discutirán en el recinto del Senado
importantes reformas, como la de salud, la laboral y la jurisdicción agraria, entre
otras. Junto a nuestro equipo de trabajo, nos dedicaremos a enriquecerlas, siempre
con el objetivo de construir un país más justo, inclusivo y con oportunidades reales
para todos y todas.


Cada iniciativa, logro y esfuerzo desde el Senado es el reflejo de El Poder de las
Voluntades, que nos permitió llegar hasta aquí. Por eso, seguimos invitándolos a
ser parte activa de este proceso. Queremos escuchar sus ideas, necesidades y
propuestas, porque ustedes son el motor que guía nuestra labor.
Cuenten con nuestro compromiso y dedicación para transformar sus esperanzas en
realidades.

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